Los alimentos y las caries

Los hidratos de carbono y particularmente los azúcares que ingerimos, interaccionan con las bacterias en nuestra boca, este proceso libera ácidos de las propias bacterias que provoca una rápida disminución del pH en el interior de la boca desencadenando la desmineralización del esmalte de los dientes y la destrucción del mismo generando lo que conocemos por caries. A peor higiene dental, habrá mayor concentración de bacterias en nuestra boca, éste ciclo sólo se puede romper, volviendo a subir el pH cuando nos cepillamos los dientes.

 

Alimentos cariogénicos

Los alimentos con mayor potencial destructivo son aquellos que contienen azucares refinados, puesto que son más fácilmente metabolizables y especialmente los alimentos pegajosos que son más difíciles de remover y limpiar:

  1. Bollería, pasteles, galletas, patatas fritas y otros alimentos salados con compuestos industriales, procedentes de almidones parcialmente modificados del maíz y del trigo, también pueden llegar a provocar el proceso.
  2. Algunos de los Snacks de supermercados tienen dichos almidones y a veces combinados con sacaras o glucosa.
  3. Refrescos azucarados, bebidas energéticas y algunos zumos azucarados son especialmente erosivas y dañinos para el esmalte dental, además de por su ingesta frecuente en niños.
  4. La lactosa (azúcar de la leche) aunque no es tan cariogénico como los otros azucares, al ingerirse en niños con frecuencia y por la noche antes de dormir, también es un alimento a tener en cuenta.
  5. Los azucares de las frutas y verduras, NO se consideran peligrosos porque están contenidos en su interior de la estructura celular y no se suelen liberar completamente en la boca durante la ingesta.

Cantidad y frecuencia

Más que la cantidad de dichos azucares, es más importante la frecuencia de ingesta, tomarlos entre horas y peor aún antes de dormir, es especialmente peligroso, ya que durante el sueño disminuye la secreción de la saliva que neutraliza la acidez dejándonos más desprotegidos ante la bajada del pH.

Recomendaciones para evitar las caries

  1. Disminuir la frecuencia del consumo de azucares entre las comidas y sobretodo evitar bebidas o alimentos azucarados pegajosos, más aún por la noche antes de dormir.
  2. Recuerda que los azúcares añadidos deben proporcionar diariamente menos del 10% de la energía total de la dieta. Lo que equivale en un niño pequeño a 5 cucharaditas de azúcar.
  3. Disminuir el consumo de los alimentos potencialmente cariogénicos descritos anteriormente.
  4. Aplicación de compuestos fluoruros, a partir de los 6 años (gel tópico, barnices, espuma o pastas)
  5. Cepillarse con pasta fluorada 3 veces al día, sobretodo antes de dormir durante 3 minutos de media.
  6. Selladores de fosas y fisuras en los molares definitivos en los niños de 5 a 16 años.
  7. Ir a tu dentista de confianza al menos una vez al año para valorar el estado general de tu boca.